Sálvame el culo, hermanastro - Maddy May

Después de una intensa carrera matinal, Maddy May regresa a casa con una camiseta mojada pegada a la piel. Buscando refrescarse, la linda nena se vierte agua refrescante de una botella sobre su pecho, resaltando su hermoso cuerpo. Está ansiosa por prepararse para una cita especial, pero primero, Maddy necesita un baño relajante. Entonces, pide ayuda a su hermanastro con una tarea que se ha vuelto inesperadamente urgente. Ella necesita que él meta toda su ropa en la lavadora. Con un suspiro, acepta pero comete un terrible error. Debido a una confusión accidental con los ajustes de lavado, la ropa de Maddy se ha encogido. Mientras el hermanastro lucha por solucionar el problema con una plancha, su sexy hermanastra se masturba suavemente en el baño. Cuando Maddy regresa a su habitación, casi de inmediato comprende por qué probablemente faltará a su cita de hoy: toda su ropa se ha arruinado. Llama a su hermanastro para regañarlo, pero el chico le ofrece un par de jeans. Inmediatamente después, se vuelve obvio para ambos que están demasiado apretados, sin posibilidad de que Maddy se mueva. En un momento de inspiración, su hermanastro usa aceite de masaje para quitarle los jeans a su atrevida hermanastra, lo que provoca un gran agujero en su última prenda disponible. Pero al astuto hermanastro se le ocurre un trato brillante: un nuevo vestuario para el sexo. Toca el apretado chocho de Maddy, encuentra su clítoris y siente que su excitación aumenta. La joven, consumida por la lujuria, accede. Cuando su hermanastro comienza a provocarla con su dura polla a través de sus jeans, ella se olvida de su cita. Un polvo duro es lo que necesita ahora más que nada. Se inclina lentamente y se lleva la gorda polla de su hermanastro a la boca. Después de una mamada increíble, su coño está tan mojado que le ruega a su hermanastro que la penetre lo antes posible. Sin dudarlo, el chico le mete su carne palpitante en el coño. Esto la deleita tanto que se corre con fuerza. Pero para vivir la experiencia completa, Maddy lo toma en posición de perrito hasta que su hermanastro suelta toda su crema por todo su bonito vientre. Parece que ambos están listos para ir de compras ahora.